Amanda es mucha mujer
Hola, hoy les contaré de mi prima Amanda. Seré breve en su descripción, primero les mostraré una foto de esta bella colombiana y luego hablemos.Como pueden apreciar, es una bella representante del sexo “débil”. A los 16 años se casó con un vago de Cali, que la hacía trabajar de prostituta. El señor, bebía y tenía mala bebida. Y además de abusar de ella, la golpeaba. Un día mi prima, se cansó y le devolvió, uno por uno los golpes que ese mal hombre la dio en los 3 años de casados. Medio muerto, lo dejó en la cama, desnudo con un palo enterrado en el culo, en alegoría a las veces que le penetraron a ella trabajando de prostituta.
Amanda huyó de Colombia, la iban a matar por lo hecho a su proxeneta. Y apareció en mi casa, en Luján, Provincia de Buenos Aires, Argentina. La nena, hija de una hermana de mi madre, entró de contrabando al país y estaba en planes de irse a España. Cuando llegó a mi casa, púdicamente vestida, mi mujer puso el grito en el cielo.
– ¡Esa prostituta, no se queda ni un día en casa!
¿Les parece justo? ¡Pobre niña!
Bueno, en casa no se quedó. Le conseguí un ranchito en el campo, donde vivió unas 6 semanas. Yo la visitaba a diario, le llevaba comida, algo de dinero. Y ella me lo agradecía, en la cama. Al cabo de esas 6 semanas, cuando yo ya me quedaba sin dinero, sin fuerzas y sin líquidos, ella partió a España, que es el verdadero objetivo de este relato.
Tengo prohibido hablar de cómo y por qué vía llegó a Madrid. Luego de vivir con otro vivillo, pero que le trataba bien, ella le hace un servicio a un señor, turista, español de Alicante. Toño, se llama. Queda impactado con Amanda y la visita 3 veces en 6 días. Conversaban mucho y se interesa en ella. Arregla con el vivillo, y euros mediante, se lleva a Amanda a Alicante prometiendo casamiento. Se casan enseguida. Para lo cual Toño le consigue documentos españoles. Al principio Amanda está enloquecida. Señora, de un señor importante. Casa propia, enorme y bonita, nunca le falta dinero, ropa, joyas… Pero, siempre hay un pero, Toño no es suficientemente hombre para mi prima. Como se dijo al principio, “Amanda es mucha mujer”. Y mucho más para un anciano. Toño tiene 64 años, es jubilado y ustedes saben, los jubilados tienen un jubilado entre las piernas.
Con el trascurso de las semanas, Amanda vive cachonda y loca por pollas. No quiere arruinar todo, pero ella tiene 24 años, y su coño está habituado a más de una follada diaria. Ni hablar de su culo, impoluto desde que se ha casado con Toño.
Como Toño, es jubilado pero no retirado, tiene inversiones, negocios, está todo el día fuera de casa. Amanda comienza a pasear por Alicante. Tiene su propio auto, es libre y tiene tiempo. Además tiene necesidades. Cuando va de paseo siempre se viste monacalmente.
Todos los días visita un centro comercial distinto, compra chucherías y se consigue un mozo joven para sus necesidades urgentes. Los lleva a un alojamiento, lo hacen dos veces. Agradece y no los ve más. Ella sabe que si se enrolla con alguno, es para problemas. Vuelve a la casa y prepara todo para la llegada de Toño. Lo recibe de buen humor, sin urgencias, a veces muy pocas veces tienen sexo. Toño está encantado con el cambio de Amanda.
Todo marcha sobre rieles, hasta que en una de las visitas a un centro comercial, aparece Jose, un vigilador del centro. Jose es soltero, 40 años, muy buena pinta. Además lleva una pistola 9 mm que a Amanda la hipnotiza. Desde Colombia, que no ve armas y a ella le gustan.
– Señorita, por favor deme sus documentos.
– ¿Por qué?
– Se nos informa, que alguien con su descripción, está robando en los comercios.
– Yo no he robado…
– Acompáñeme.
Le conduce a una pequeña habitación, con dos sillas y una mesa. Es el lugar que ellos usan para descansar. Pero le dice que es la sala de averiguaciones.
– Coloque todo lo que tenga en su bolso sobre la mesa.
No hay nada importante, maquillaje, documentos personales, llaves, pañuelo, un panty rojo. Jose, los toma y los huele. Amanda, sonríe.
– Acá no hay nada, debo revisarla a usted.
– Sí usted lo dice, usted es la autoridad.
Le hace poner de pie, la apoya sobre un muro, la abre de piernas y mete sus manos entre ellas, hasta el coño. Ella, ya está húmeda, a Jose se le para la polla. Sube sus manos por las tetas y le acaricia, los pezones. La hace girar, le acaricia el culo por debajo de la falda, sube sus manos hasta el cuello y cuando las pasa a la terrible delantera de Amanda, le apoya la polla en el culo, pantalón y falda mediante, Amanda siente que esa polla debe ser enorme.
– Oficial, creo que su armamento está muy cargado, debería dejarme ayudarlo…
Amanda se pone de frente, se pone de hinojos y le abre el pantalón y aparece la polla más linda que Amanda viera en años. Descripción: más de 20 centímetros (tal vez 23) ancha, Amanda no la puede tomar con solo una mano y el glande es aún más grueso. Lo lleva con sus dos manos a su boca y lo empieza a chupar con desesperación. Jose, le larga tres enormes chorros de los que Amanda no debe haber dejado caer una sola gota. Igual ella, le deja seca la polla, se levanta, lo besa.
– Me llamo Amanda
– Yo Jose
– ¿A qué hora te retiras?
– A las 14.
– Te espero, en el segundo subsuelo, tengo un Audi A3 rojo, no me falles.
– Allí estaré.
En este sencillo acto de investigación policial, con minucioso cacheo, nace el romance de mi prima Amanda, y el vigilador Jose. Una diosa, de cuerpo increíble y un pícaro de enorme polla.
14 en punto, Jose entrega el arma en el armero, y baja al segundo subsuelo. En cuanto Amanda lo ve, le prende y apaga las luces para que Jose se guíe.
– Hola
– Hola, sube que estamos apurados.
Ella conduce el auto, entran a un albergue de lujo. Le da dinero para que él pague. Le indican el cuarto. Conduce el auto hasta la habitación, cierra una lona, para que no se vea de afuera, suben por una escalera, abren. Entran y entran en frenesí.
Jose, la desnuda de lo poco que Amanda lleva puesto. Zapatos, vestido, corpiño y nota que se ha cambiado el panty.
– Éste lo conozco…
– Pensé que te gustaría.
Se lo arranca y lo vuelve a oler.
– Ahora tiene olor a leona en celo.
– No pierdas tiempo, desnúdate.
Cuando los dos están como cuando vinieron al mundo, la acuesta, se sube a ella, le abre las piernas, le hace sentir su polla que acaricia el coño, pero no amaga introducirla. Le besa la boca y con las manos, le acaricia las tetas y le pellizca los pezones. Ella, a medida que se pone cada vez más cachonda, le araña la espalda y las nalgas. Están así varios minutos, como 10 o quince. Amanda, larga líquido por el coño, está hirviendo, pero le encanta lo que Jose le hace. Recordemos, Amanda, que perdió la virginidad a los pocos años, siempre tuvo sexo de urgencias. Los vivillos que la usaron, son reacios a tener previas, van a los bifes. A los muchos clientes que tuvo de prostituta, las urgencias las usó ella. Ninguno valía la pena. No hablemos del pobre Toño, es poco hombre y vale menos que los clientes. Los mozos que tuvo este último tiempo, no saben cómo hacer una buena previa, Pero este tío sabe lo que hace. Cuando, él va bajando con su boca, por el pecho Amanda, el coño ya era un grifo. Cuando le chupó los pezones, ella gritó de placer. Cuando llegó, finalmente a su concha, Amanda tuvo un orgasmo que nación desde el fondo de su cuerpo, gritó, pataleó, gozó como nunca había gozado. Mi puta prima, tuvo su primer orgasmo de verdad. José le siguió comiendo el coño, ella tuvo otro orgasmo, él mientras tanto le fue introduciendo sus dedos en ese prodigioso culo. Pero finalmente, le metió la polla en el coño, a pelo, la bombeó por diez minutos, ella volvió tener otro orgasmo, el cuarto. Cada orgasmo, parecía que iba a ser mortal para ella. Me contó que perdía el conocimiento por un segundo en cada uno. Luego de esto, le hizo levantar las piernas y empezó a chuparle el culo.
– Sí, Jose, dame por el culo.
Ni lerdo ni perezoso le fue abriendo, ese hermoso culo, lengua, dedos y finalmente se la clavó, a pelo hasta que entró esa máquina que porta Jose. Cuando sus bolas hicieron contacto con las nalgas, la dejó clavada en el fondo y vuelve a eyacular como en el centro comercial, pero ahora en el fondo del culo de Amanda. Cuando ella siente el líquido caliente en sus entrañas grita, desesperada,
– Jose, eres el mejor macho que me ha follado.
Quedaron los dos destruidos, pero hubo tiempo para que Amanda, se suba a Jose, cómo él lo hizo antes estuvieron besándose como media hora. Finalmente se higienizaron, se vistieron, y se fueron en el Audi. Dejó a Jose, en el centro y le dijo.
– Mañana, te espero en el estacionamiento, nueva mente. ¿Vendrás?
– ¡Por supuesto!
Así, empezaron a verse todos los días, cogían en los mejores albergues, solo cuando Amanda estaba con la menstruación, tomaban algo en la playa. De a poco, los encuentros se fueron haciendo más largos y una vez durmieron juntos en el albergue.
Toño, es tonto, pero no tanto. Venía viendo que Amanda tenía un amante. La encaró y ella, le dijo exactamente lo que pasaba. Que Toño no la complacía, ni la iba a complacer nunca. Que había conocido a un toro y que no lo iba a perder. Toño y ella pergeñaron una solución. Juntos se lo contaron a Jose, que aceptó de inmediato. ¿Cómo fue la cosa?
Jose se mudó con el matrimonio, en las mañanas seguiría trabajando en el centro comercial y a las tardes, cuidaría la casa, atendería a Amanda. En la noche, solo con permiso de Jose, Toño podría tener relaciones con ella, si no ella dormiría con Jose.
Hace un año, Amanda tiene dos maridos, el que paga, el que se luce con ella en fiestas y presentaciones. Y el otro, el que la folla, como no la habían follado nunca.
Esto nos demuestra de que como empezamos.
AMANDA ES MUCHA MUJER PARA UN SOLO HOMBRE.
Aclaraciones: Amanda, es verdadera, no es la niña de la foto. Es colombiana pero no de Cali, no se llama Amanda. Nunca estuvo en Luján, si en otro lugar de Argentina, jamás estuvo en Madrid, a su marido lo conoció en otra ciudad. Toño y Jose son ciertos, no se llaman así y no viven en Alicante, viven en otra ciudad de España.
Todas estas precauciones porque hay gente peligrosa en Colombia, que le podría hacer mal a mi prima.